-¿Que hace un catalán, cartero de profesión, en plena selva peruana?
-Catalán sí, cartero ya no, ahora jubilado. ¿Qué hago? Creando un sueño. Impulsando la creación de un poblado, autosuficiente y libre, con la visión y objetivo de facilitar “nuevas” formas de comunicación, relación y responsabilidad entre nosotros, que nos lleven a vivir desde el “sentir” del corazón y ponga “en su lugar” el pensar de la mente.
-¿Conoces otros lugares tan salvajes?
-¡Sinceramente no! De todos modos, cada entorno tiene su Espíritu. Hay rincones y situaciones en los Pirineos que nada tienen que envidiar a la selva.
-¿Qué buscabas en la naturaleza?
-El tema de la naturaleza ha estado siempre muy vivo en mí, he vivido muchos años en el campo. Quizás la pregunta sería, ¿qué encuentras en la naturaleza? Paz, familiaridad, complicidad, energía, alimento…
ENTREVISTA CON EL FUNDADOR DE NOVA TERRA
ANDREU CORBERA
Por Emmain
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Hemos tenido el honor de tomar contacto con Andreu Corbera, en un breve viaje que acaba de realizar a Barcelona, antes de seguir luchando por su sueño más allá del océano. El Fundador de Nova Terra es una persona valiente que está haciendo realidad un proyecto multidimensional, ya que implica trabajar por la naturaleza, por las personas que viven en ella y además acoge a viajeros que puntualmente quieran compartir tan profunda y transformadora experiencia. Porque no hay excusas para no vivir la vida soñada y porque vale la pena tomar contacto con personas reales que como recompensa a la lucha contra sus miedos obtienen realidades espectaculares. Nova Terra está en un rincón accesible de la selva peruana y en un rincón de los sueños más valientes de muchos de los lectores de Karma Digital.
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NOVA TERRA
El Fundador de Nova Terra es una persona valiente que está haciendo realidad un proyecto multidimensional, ya que implica trabajar por la naturaleza, por las personas que viven en ella y además acoge a viajeros que puntualmente quieran compartir tan profunda y transformadora experiencia.
-¿Por qué San Pedro de Cumbaza?
-Por la Ley de Atracción; en mi primer viaje a Perú, en el 2004, ya en Tarapoto, en uno de los viajes en “carro” al pueblo de San Pedro de Cumbaza, se produjo un fuerte sentimiento ante la impresionante visión de valles y montañas cubiertas de vegetación tropical, sentí… ¡cómo me gustaría vivir aquí!, sin ser consciente del deseo que acababa de enviar al Universo. Y a los tres años “apareció” la oportunidad, nunca imaginada, de comprar un espacio de selva antiguamente trabajado muy cerca del pueblo y, ¡qué sorpresa: era el mismo valle que tres años atrás me había cautivado!
-¿Desde cuándo?
-La relación con San Pedro y sus habitantes empieza en el 2004, gracias a las sincronías. Mi intención era, huyendo del ruido de Tarapoto, buscar un alojamiento en San Antonio de Cumbaza, algo más alejado, pero en el viaje, el mismo chofer, después de un breve interrogatorio, me ofreció una casa que tenía en San Pedro, ya que el residía en Tarapoto (por supuesto acepté). En el transcurso del mes aproximado que estuve allí, se fueron gestando amistades que, en la evolución de las cosas, precipitaron lo que ahora es.
-¿Cómo fuiste recibido por la comunidad autóctona?
-En general la acogida fue abierta y alegre, a pesar de los lógicos recelos hacia el “gringo”, como nos llaman en un principio a cualquiera que no sea del lugar, y que, por el mero hecho de ser europeo, está en una situación privilegiada. Es importante tener en cuenta que, al ubicarse el proyecto en las inmediaciones de San Pedro, éste ofreció la posibilidad de trabajo a varias familias del pueblo, facilitando obviamente el recibimiento y la aceptación de mi persona.
-¿Te habías imaginado nunca como un promotor del respeto de la naturaleza?
-La verdad es que nunca me he sentido promotor de nada, aunque sí un poco atrevido y con una buena dosis de “confianza” en ser “sostenido” por lo que no se ve. Si el amor y respeto hacia la naturaleza, y el deseo de convivir con ella son sinónimos de promover, entonces sí, debo ser un promotor, como tantos otros, aunque insisto, no me siento como tal.
-¿Qué filosofía inspira tu proyecto?
-La filosofía de mi corazón, con todos sus logros y carencias. El anhelo incontenible de un Mundo Nuevo, habitado por un Ser Humano Nuevo. Un espacio donde vivir en paz, armonía y abundancia, en el que el respeto con las afinidades y la tolerancia amorosa con las diferencias sean los ejes de la cotidianidad, sin exclusiones por razones de piel, cultura, sexo, religión, etc…
-¿Te sientes comprendido?
-Comprendido sí, anímicamente arropado también. Debo decir que, hasta el momento, estoy llevando el proyecto yo sólo, con lo que representa tanto a nivel económico como organizativo. La Nova Terra necesita y está abierta a la participación y colaboración de personas con similares inquietudes y ganas de hacerlas realidad.
Porque no hay excusas para no vivir la vida soñada y porque vale la pena tomar contacto con personas reales que como recompensa a la lucha contra sus miedos obtienen realidades espectaculares.
Andreu Corbera
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-¿Cómo te lo imaginas de aquí a cinco años?
-Me imagino agradecido y satisfecho, viendo lo que en un tiempo fue un proyecto, ya lleno de vida. Imagino los cultivos en rendimiento, ofreciendo todo lo necesario para una sana alimentación. Imagino la llanura del poblado cubierta de flores y exóticas plantas, y los niños correteando, alegres, disfrutando y enseñando. Imagino los adultos con la misma cara de felicidad que los niños, viviendo en armonía, aprendiendo y enseñando. Hay muchas cosas que nos podemos enseñar unos a otros, sólo se requiere una actitud receptiva y una buena dosis de humildad.
-¿Qué echas a faltar de tu Cataluña natal?
-Entre otras cosas y sobre todo ¡la comida!, principalmente por la monotonía en los ingredientes, siendo como es, una tierra con una gran variedad de alimentos. Soy una persona que se adapta con facilidad a los cambios, también en la comida. Ocurre que en esa zona por lo general son poco o casi nada variados a la hora de comer. Sorprende ver que en el desayuno, almuerzo y cena prácticamente no varían en lo que a alimentos se refiere: arroz hervido, frijoles, pollo, papas (patata), yuca, plátano… arroz hervido, frijoles, pollo, papas, yuca, plátano… y mañana… lo mismo, y pasado… lo mismo…
También echo en falta la comunicación a niveles íntimos, es decir, poder expresar determinadas maneras de pensar, determinadas emociones, pues la cultura y formas de pensamiento son bastante diferentes, y no siempre “entendemos” las cosas de la misma manera, los valores son diferentes y también lo son la forma de expresarlos.
-¿Qué tipo de persona podría unirse a tu proyecto?
-En realidad, lo más importante es que sienta desde su corazón el deseo de construir una Nueva Tierra, entre tod@s y para tod@s. Con ánimo y disposición a aprender de todo y de todos. Con un compromiso firme para con el bien común, por encima del personal. Con ganas de emprender algo nuevo, desde la valentía y la “confianza”. Personas responsables de sí mismas y de sus actos. Personas que se sepan y se sientan capaces de llegar a acuerdos y decisiones a través del diálogo y el consenso. Personas con ingresos propios y económicamente independientes, dispuestas a compartir responsabilidades y recursos. En fin, personas con nuevas perspectivas, nuevas ideas, nuevas ilusiones y amorosa intención.
Que la Nova Terra pueda llegar a ser un referente de comunión entre los seres humanos, la naturaleza y todo lo que en ella vive.
-¿En que modalidad?
-Se pueden contemplar diferentes grados de compromiso. Personas que, por su situación laboral, familiar u otros motivos, no están físicamente allí pero contribuyen con aportaciones económicas, ya sean regulares o periódicas, facilitando enormemente las labores de mantenimiento de los cultivos y de construcción. Personas dispuestas a permanencias temporales según su disponibilidad, y así participar en la construcción y consolidación del proyecto, aportando trabajo, conocimientos y recursos, que sientan el compromiso, ganas de participar y formar parte del proyecto. Por último, personas que por su situación personal y voluntad, decidan residir permanentemente, previo consenso de intereses, formas y voluntades, pasando a formar parte del equipo organizador, con el compromiso de velar por la esencia del proyecto y contribuir con sus opiniones, esfuerzo y recursos a la propia evolución del mismo.
-¿Cómo se adaptan los visitantes a la ausencia de comodidades?
-Como antes he expuesto, la Nova Terra está en fase de construcción y, por lo tanto, hasta el día de hoy han sido pocas las visitas recibidas, aunque ya hay varias personas interesadas en conocernos, principalmente de Centroamérica y Sudamérica. De todos modos las visitas realizadas han servido para constatar ciertas incomodidades y hacer los ajustes necesarios.
Pude comprobar que los dos tambos (cabañas) terminados con caña brava facilitaban la entrada entre las rendijas de mosquitos, humedad, arañas y otros insectos. Por este motivo decidí derribar las paredes de caña y sustituirlas por adobe, bastante más laborioso, lento y caro, pero garantizando un mejor aislamiento y confort. Al mismo tiempo se ha dotado de baño propio a cada tambo, ofreciendo un espacio con las mínimas y necesarias comodidades, teniendo en cuenta su ubicación en plena selva.
En nuestra cultura hemos llegado a tal nivel de “ficticia comodidad”, que realmente intoxica y nos separa en la relación natural y llana con nuestra Madre Tierra.
-¿A quién no le aconsejarías el viaje?
-A quien no esté dispuesto a adaptarse a “ciertas incomodidades”. A quien no esté dispuesto a la aceptación amorosa de las diferencias entre los integrantes y entre la comunidad autóctona. A quien no esté con disposición a aprender y con intención sincera para con su propio proceso y el respeto al proceso de los demás. A quien no esté dispuesto a dar lo mejor de sí mismo para el bien común. A quien tenga miedo a cualquier “bichito”.
-¿Cómo llegar a ese rincón del paraíso?
-Los vuelos de Barcelona a Lima suelen hacer escala en Madrid, aunque también hay un vuelo directo Barcelona-Lima, no sé si es diario. El tiempo de vuelo es de 12h aproximadamente. Una vez en Lima hay dos opciones, una en vuelo interno Lima-Tarapoto (130$ + o -) y tarda 1h, o bien en bus, bastante más barato, entre 100 y 130 soles (1€ = 4 soles + o -), dependiendo de la compañía, y tarda 26h aproximadamente, salvo “imprevistos”, eso sí, con un recorrido a través de hermosos paisajes, Andes incluido. Una vez en Tarapoto os venimos a recoger al aeropuerto o terminal. Después de un viaje de 10km en “carro”, llegamos a San Pedro de Cumbaza, desde donde caminamos por un sendero que, en media hora nos lleva a la Nova Terra.
Está previsto, aprovechando una pista que sale desde Tarapoto por el lado contrario del río Cumbaza hasta los cerros, y que pasa muy cerca del fundo (finca), tener el acceso directo Tarapoto-Nova Terra, facilitando enormemente la comunicación.
En relación a los billetes de avión, es aconsejable a ser posible comprarlos con bastante antelación, pues se pueden encontrar precios más económicos. Si la compra se realiza por Internet, es interesante comparar precios entre distintos buscadores de vuelos.
-¿Es verdad que por la noche el sonido de la selva es impresionante?
-La selva en sí misma es ya impresionante, y si además es de noche, aún más.
Hay que tener en cuenta que gran parte de la fauna salvaje es más activa de noche, y también sus “comunicaciones”. Es un espacio sobrecogedor… y apasionante.
El brillo en los ojos de Andreu cuando habla de la Nova Terra transmite una emoción particular que habla de sencillez y de grandeza al mismo tiempo. La paz con la que este hombre menudo afronta las cosas la subraya con una sonrisa contagiosa y arranca del corazón el sincero deseo de ir a verle a su casa, a la casa de todos allá en la selva y aquí en nuestros corazones. Gracias Andreu por tus palabras, por tu fuerza y por cuidar de la madre Tierra.
En realidad, lo más importante es que sienta desde su corazón el deseo de construir una Nueva Tierra, entre tod@s y para tod@s. Con ánimo y disposición a aprender de todo y de todos. Con un compromiso firme para con el bien común, por encima del personal. Con ganas de emprender algo nuevo, desde la valentía y la “confianza”. Personas responsables de sí mismas y de sus actos. Personas que se sepan y se sientan capaces de llegar a acuerdos y decisiones a través del diálogo y el consenso. Personas con ingresos propios y económicamente independientes, dispuestas a compartir responsabilidades y recursos.
Andreu Corbera
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