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HEMEROTECA- Tomo II

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Hace un par de números que ofrecimos al lector una breve introducción al estudio de Tarot; hoy como prometimos empezaremos a ir poco a poco desvelando al neófito en estas lides la extensa simbología hermética que encierran en él los llamados Arcanos Mayores. Empezaremos pues nuestra labor sin dilación, comenzando naturalmente por el Arcano Mayor n.º 1.
Si observamos atentamente el Arcano nº 1, no nos será difícil de apreciar que la disposición del mago, como se le llama comúnmente a esta lámina, responde perfectamente el trazado de la letra aleph. En la parte superior, situado sobre la cabeza del mago podemos ver el signo divino de la vida universal. La parte baja de la lámina nos presenta la tierra ornamentada con sus productos, símbolo pues de la naturaleza. En la mitad de la lámina vemos al hombre, detrás de una mesa sobre la que hay diversos objetos. Las partes derecha e izquierda de la figura están ocupadas por las manos del mago señalando a la vez el cielo y la tierra. Esto simboliza a los dos principios, el activo y el pasivo del Todo, correspondiendo a las dos columnas; Jakin y Bohas del Templo de Salomón. Podemos decir que con una mano el hombre busca a Dios en el cielo, y la otra la hunde en lo inferior para elevar el demonio hasta sí, reuniendo así, lo divino y lo diabólico.
El Tarot nos muestra de esta forma la función mediadora universal, acordada al Adan-Kadmon. Sigamos con la varita mágica levantada por la mano; delante de él están los cuatro símbolos del Tarot: La Copa, la Espada, los Oros y el Basto (figurado por la varita que el mago lleva en la mano). Los cuatro grandes símbolos están colocados en la mesa por azar y el hombre debe llegar a dominarlos y ordenarlos.
El mago, primer símbolo del Tarot se caracteriza con el nombre de: la unidad. Esta unidad tiene su origen, el cual es impenetrable para el hombre, significa el principio de toda cosa. Y aunque no podamos llegar hasta este desconocido origen, se nos permite hallarlo en sus consecuencias. Nuestro estudio se limitará pues al desarrollo de la unidad-principio en creación, según la cosmografía de la antigua iniciación. Dios, el hombre y el Universo son el triple sentido de este Primer Arcano.
Vamos a detallar ahora algunos significados de esta primera lámina del MAGO.
El Jeroglífico primitivo del Tarot, representa: El hombre.
En la Cábala: Kether. En el mundo divino: El Padre.
En el mundo humano: ADAM. En el Universo: La Natura Naturante.
ALEPH: 1.ª letra hebraica. La aleph jeroglífica expresa al hombre, considerado en sí mismo como una unidad colectiva, principio maestro y dominador de la Tierra. De este sentido han ido derivándose las ideas sobre el Universo del principio que lo determina. A la letra aleph se le confiere el valor de: potencia y estabilidad. El sentido jeroglífico primitivo es: el Hombre o el microcosmo, la unidad, el principio de todos los mundos.

El Arcano Mayor n.º 2: La Papisa, corresponde a la letra hebraica BETH.
El mismo Dios, o Dios el padre, se refleja y produce el nacimiento de Dios el hombre o Dios el hijo, negativo en relación a su creador.
El hombre es el receptor divino, como se verá, esta segunda lámina del Tarot significará todas las ideas de la primera concebida negativamente.
Esta lámina se representa a: una mujer sentada; lo contrario de la primera que representaba a un hombre de pie. (En la mujer sentada, primera idea de pasividad, por ser de su naturaleza y por su posición). La mujer se ornamenta con los atributos de la autoridad y persuasión y se halla debajo del pórtico del templo de Isis, entre dos columnas. Mientras que el hombre está revestido con los atributos del poder y se halla en medio de la naturaleza.
En la lámina n.º 2, surge la idea de recinto sagrado, de receptor divino.
Las dos columnas significan lo positivo y lo negativo, tal como se ve en los brazos del mago. La mujer se halla coronada con una tiara donde se observa el creciente lunar, se desprende un velo transparente que la envuelve con los pliegues que caen sobre su rostro. Una cruz solar le cuelga sobre el pecho y un libro abierto apoyado sobre sus rodillas, que cubre a medias con su manto. Es la imagen de Isis, la naturaleza, de la cual no hay que levantar el velo ante los profanos. Tal como lo indica el libro, las enseñanzas de Isis son de orden oculto. Ella enseña al mago los secretos de la verdadera cábala y de las ciencias ocultas. Los significados de esta segunda lámina de la PAPISA representan: En el jeroglífico del Tarot: la boca del hombre. En la Cábala: Chocmah.
En Astronomía: La Luna. Día de la semana: Lunes. En el mundo divino: el Hijo. En el mundo: EVA. En el Universo: la Naturaleza Naturada.
BETH: 2.ª letra hebraica. Expresa jeroglíficamente, la boca del hombre como órgano de la palabra. La palabra es una elaboración interna del ser. Por esto la beth representa todo que es interior, central, lugar de realización.
De aquí surgen las ideas de Santuario, mansión inviolable del hombre y de Dios. La beth expresa también toda producción emanada de esta misericordiosa morada, toda acción interior y activa; de aquí las ideas de enseñanza, de elevada ciencia, de ley, de gnosis, de ciencias ocultas o cábala.

El Arcano Mayor n.º 3: LA EMPERAtrIZ, le corresponde la letra hebraica CHIMEL. Este símbolo ha de expresar la idea de generación, de corporación en todos los mundos. La mujer aparece con alas, o bien en el centro de un sol radiante. Idea de la espiritualidad del principio animador de los seres. En su mano derecha retiene a un águila es el símbolo del alma y de la vida (Espíritu Santo). En su mano izquierda ostenta un centro, signo astrológico de Venus, está sostenido por dicha mano para indicar la influencia pasiva que ejerce la naturaleza, Venus-Urano, o la mujer durante la generación de los seres. Está coronada por una corona de doce puntas o también doce estrellas. Signo de la difusión del principio animador a través de todos los mundos y del sol a través del zodíaco. Esta tercera lámina muestra el resultado de la acción recíproca de los dos primeros términos que se neutralizan en un mismo principio. Sus significados son:
En el Jeroglífico del Tarot: La mano en la acción de coger.
En la Cábala: Binah. En Astronomía: Venus. Día: Viernes.
En el mundo Divino: La Fuerza Animatriz Universal. En el humano: La Humanidad. En el Universo: El Mundo.
GHIMEL: 3.ª letra hebraica. Expresa en jeroglífico la garganta, la mano del hombre semicerrada y en actitud de coger un objeto. La garganta es donde se forma la palabra concebida en el cerebro. Es el símbolo envolvente de las formas espirituales, de la generación orgánica en todos sus aspectos, de todas las ideas que se derivan de los órganos corporales o de sus actos. La generación es el misterio de la unificación espíritu-materia, mediante el cual lo divino se transforma en humano. Con esto, se puede comprender lo que representaba Venus-Urania.
El Arcano Mayor n.º 4: EL EMPERADOR. Correspondiente a la letra hebraica DALETH. Esta lámina no debe expresar de modo pasivo, todo lo que las anteriores, significaron en modo activo. Un hombre está sentado de perfil. El hombre señala lo activo; en cambio su posición muestra que lo activo está engendrado por un término superior. El Tarot n.º 1 el Mago se halla de pie y de frente ‘‘activo absoluto’’; este Tarot n.º 4, está como ya hemos dicho, sentado y de perfil. ‘‘Activo relativo’’. En la mano derecha tiene el centro simbólico de la generación o de Venus. Se halla en la mano derecha para indicar la influencia activa que ejerce el principio animador en la naturaleza, por oposición al principio formador (arcano 3). Lleva barba y el casco que lleva tiene doce puntas (seis a cada lado). Está sentado sobre una piedra de forma cúbica, en la que está dibujada un águila. El casco indica el dominio de la voluntad divina en el Universo y la vida (el águila). Su posición sobre la piedra cúbica expresa la realización en los tres mundos.
Las piernas del hombre están dispuestas en forma de cruz, el busto en forma de triángulo. Representa la Dominación del espíritu sobre la materia.
Este Arcano expresa siempre el reflejo del primero. Su significación en el Jeroglífico del Tarot representa: El Seno. En la Cábala: Chesed.
En Astronomía: Júpiter. Día: Jueves. En el mundo divino: Reflejo de Dios el padre, la Voluntad. En el mundo humano: Reflejo de Adán, el Poder.
En el Universo: Reflejo de la naturaleza naturante: El alma del Universo.
El Arcano Mayor n.º 5: EL PAPA. Corresponde a la letra hebrea HE.
Debe expresar las ideas de: Vida, de ser, de reunión. El Papa está sentado entre las dos columnas del santuario. Se apoya en una cruz de tres travesaños. Con la mano derecha nos muestra el signo del esoterismo. La cruz simboliza el ‘‘lingham’’ triple de la teogonía india, o sea, la penetración de la potencia creadora a través del mundo divino, intelectual y físico, (primera idea), manifestación de la vida universal. Las dos columnas representan, la de la derecha la ley; la de la izquierda: la libertad de obedecer y desobedecer, esencia del ser (segunda idea). Este hombre iniciador está cubierto con una tiara. A sus pies están postrados dos hombres coronados. Aquí encontramos en ‘‘activo’’ el símbolo expresado en ‘‘pasivo’’ por la segunda lámina. La misma idea de enseñanza secreta reaparece, pero ahora surge de una manera ‘‘práctica y oral’’, sin necesidad de libros (tercera idea). Su significado en el Jeroglífico del Tarot representa: El aliento. En la Cábala: Pechad. En Astronomía: El Carnero. Mes: Marzo. En el mundo divino: Reflejo de la voluntad, la Inteligencia. En el mundo humano: Reflejo del poder, la Religión, la Fe. En el Universo: La Vida Universal.
HE: 5.ª letra hebraica, expresa jeroglíficamente, la respiración, el aliento.
Se le asigna a ‘‘todo aquello que anima’’, ya que por la respiración se mantiene la vida. Mas la vida especializa al individuo haciéndole diferente de sus semejantes; por esto, la idea de ‘‘ser’’ se le atribuye a He. Es también el principio que enlaza el cuerpo material al espíritu divino, de la misma manera que el hombre enlaza a Dios con la naturaleza.
Se le atribuye a esta letra la idea de ‘‘lazo’’, por la reunión de los opuestos, y de religión.
El Arcano Mayor n.º 6: LOS AMANTES. Le corresponde la letra hebraica VAU.
Debe expresar el significado de las ideas de reunión y de antagonismo con todas sus consecuencias. Un joven imberbe (el mago del arcano 4) descubierto, está de pie, inmóvil en la encrucijada de dos caminos. El demuestra un estado distinto al Arcano n.º 1. No es un iniciado, y por tanto, ignora los medios que permiten gobernar las corrientes magnéticas de la luz astral, y resta aturdido en la oposición de las ideas antagónicas que es incapaz de dirigir. Dos mujeres una a la derecha, otra a la izquierda, apoyan una mano sobre los hombros, y al mismo tiempo le señalan con la otra los dos caminos que puede recorrer. La mujer de la derecha ciñe un círculo de oro sobre su frente, mientras que la otra va despeinada y coronada con pámpanos. Dependerá del camino elegido para que el joven pueda transformarse en el mago iniciado del Arcano 1, o por el contrario, que se pierda en las distracciones de este mundo. Dominándolo todo, en la parte superior de la lámina vemos al genio de la justicia rodeado de una aureola fulgurante, tendiendo su arco, dirigiéndolo hacia la mujer que personifica al vicio, para lanzarle la flecha del castigo.
Simbolismo éste, profundo en sus raíces que indica que si el hombre elige la senda de la virtud, será ayudado por la providencia para vencer el mal.
En Cábala veríamos que a este Arcano le corresponde Tiphereth. Corresponde también a la letra Vau, como se ha dicho anteriormente, lo que le da un sentido de ‘‘ojo’’ y por tanto relacionado con todo lo que da luz y resplandor.
La séptima carta del Tarot representa a la letra hebraica Zein, la cual tiene el sentido de ‘‘flecha’’. De ahí la idea de arma o instrumento utilizado para dominar o vencer y realizar sus propósitos. Esta letra representa la victoria en todos los mundos.
Sobre un carro de forma cúbica, cubierto por una lona azul llena de estrellas y sostenido por cuatro columnas, avanza un hombre triunfador coronado por un círculo. El triunfador, ocupando el centro de los cuatro elementos es el hombre que ha vencido y que dirige las fuerzas elementales.
Esta es la representación del septenario sagrado en todas las manifestaciones por tanto también nos muestra la influencia de la creación en la conservación de lo divino en lo humano.
En la forma jeroglífica primitiva representaba la flecha, correspondiendo en la Cábala a Hod; significados en el plano universal serían preferentemente el de la idea de un mediador plástico, o sea un plano astral, en un mundo correspondiente a la Andragonía nos señalaría a la Ley o la Realización y en un mundo divino nos presenta al hombre como función de Dios Creador y por tanto a otros niveles a Dios Padre, o mejor dicho al aspecto Realizador del mismo.
El espacio no nos permite por el momento ir más allá en nuestra exposición la cual haremos extensiva en un próximo número; de momento hemos dado un breve repaso a los siete primeros Arcanos Mayores cubriendo así el primer Septenario de nuestra máquina de filosofar. Cuales serán las ventajas o beneficios que el lector podrá sacar de todo esto, que se ha expuesto aquí? –esto dependerá del tiempo que dediquemos a profundizar en estos Arcanos y lo que representan para extraer los Principios y Leyes Universales que encierran para así, llegar a ser dueños de nosotros mismos y de lo que nos rodea, pasando a ser por así decirlo uno más entre los que han ‘‘nacido dos veces’’.
Hasta la próxima ocasión, en que continuaremos con el estudio breve y general del segundo Septenario me es grato una vez más el enviarles a través de estas páginas lo mejor de mi persona hacia la suya, amigos lectores,
Sinceramente,

JOAN ARGENTIER

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